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Test Drive: Ford Fiesta Kinetic Design 4 puertas

La nueva generación del clásico del óvalo también se ofrece en silueta sedán, con idéntica dotación de seguridad que el hatchback pero menor confort. Probamos la versión Trend, de $ 90.000. Bajo la lupa crítica, las virtudes y los defectos…

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Texto y fotos: Martín Egozcue
martin.egozcue@cars-magazine.com.ar
Cámara y edición: Luis Gindre
audiovisuales@cars-magazine.com.ar

LA BALANZA


Diseño
exterior e interior
Dotación de seguridad
Relación precio/producto
Calidad de materiales
Consumo contenido en ruta
Comportamiento dinámico
Posición de manejo
Confort de marcha
Garantía de 3 años


Faltantes de confort
Visibilidad posterior
Plazas traseras pequeñas
Auxilio de uso temporal
Luces de giro traseras rojas
Roces de la trompa en cunetas
Sin faros antiniebla


Al igual que el hatchback, el Fiesta KD sedán también se fabrica en México como producto global.

Con la séptima generación del Ford Fiesta, bautizada en la Argentina como Kinetic Design, la marca del óvalo apunta a liderar la franja más alta del segmento B, el de los autos compactos. Para eso no alcanzaba con el lanzamiento del modelo hatchback (5 puertas) que llegó al mercado local allá por noviembre de 2010. Algunos meses más tarde, hacia abril de este año, Ford amplió la oferta del Fiesta KD con la silueta sedán, que apunta a un perfil de público más familiar y que también arriba procedente desde México, donde se fabrica para todo el mercado americano como producto global de Ford. Esta versión de 4 puertas del Nuevo Fiesta, si bien reduce su equipamiento de confort respecto del hatchback, mantiene intacta su alta dotación de seguridad y el atractivo Kinetic Design, tal como el óvalo denomina a su nuevo lenguaje de diseño.


Mientras que el hatch llega en equipamiento Titanium, el sedán se limita a Trend y Trend Plus.

El Fiesta KD sedán se ofrece en dos versiones, Trend y Trend Plus, con pocas diferencias de equipamiento entre ambas, que explicaremos más adelante. CarsMagazine probó la primera de las variantes, cuyo precio a octubre de 2011 era de $ 90.340. El rival más directo que el Nuevo Fiesta 4 puertas encuentra en el mercado argentino es el Honda City, otro sedán que resulta apenas 1 centímetro más corto y que también busca posicionarse al tope del segmento B. Nissan Tiida Sedán y Fiat Linea son otros posibles rivales, aunque con algunos centímetros más de largo. A todo ellos, como iremos viendo, el Fiesta KD los supera en seguridad y en relación precio-producto.


La distancia entre ejes es idéntica al del hatchback, pero el sedán mide 35 cm más de largo.

DISEÑO
Para diferenciarlo del modelo hatchback, que en teoría apunta a un cliente más joven (supuestamente soltero si uno se guía por la campaña comercial), Ford dotó al Fiesta KD sedán de algunos elementos de diseño que le otorgan un estilo más señorial. Nos referimos puntualmente a la grilla delantera con tres barras cromadas y a los apliques cromados en los marcos de las ventanas, a lo largo de todo el lateral, y también en el marco inferior de la grilla frontal. Con esos simples detalles, el auto luce más elegante y menos juvenil. Respecto del hatchback, sin embargo, perdió el marco cromado que aloja los faros de posición de LED (aquí son de plástico negro) y las luces intermitentes en los espejos exteriores.


El sedán lleva grilla delantera con barras cromadas y luces de LED sobre marco de plástico negro.

Pero desde luego, la gran diferencia está en realidad en la incorporación del tercer volumen, que permitió ampliar la capacidad del baúl. El diseño es siempre subjetivo pero a nuestro entender, esta integración está muy bien lograda y eso tiene que ver con que el proyecto industrial del vehículo contempló, desde su comienzo, la coexistencia de las dos siluetas. Distinto es cuando, a la fuerza y a posteriori, se le busca incorporar “cola” a un auto que nació como hatchback. Visto desde atrás, el Nuevo Fiesta sedán tiene un inconfundible aire al Mondeo, otro fiel exponente del Kinetic Design. Yendo a los números, el Fiesta 4 puertas es 35 centímetros más largo que el hatchback y aumenta en 81 litros su capacidad de baúl.


CarsMagazine probó la versión Trend, que se comercializa a $ 90.340. El Trend Plus cotiza a $ 93.710.

MOTOR / PRESTACIONES / CONSUMOS
La propuesta mecánica del Fiesta sedán es la misma que en el 5 puertas. Un impulsor de la familia Sigma, que no proviene de México sino que se fabrica en Brasil, y que con 1.6 litros, 4 cilindros y 16 válvulas entrega una potencia final de 120 caballos. La transmisión es manual de 5 marchas, sin que por ahora existan versiones automáticas en el catálogo local. Esta caja, de recorridos precisos, está relacionada pensando en la reducción del consumo en ruta. En realidad, para el tránsito en autopistas de los consumidores norteamericanos, ya que este Fiesta KD fue principalmente configurado para ese mercado. Por eso mismo, como veremos, sus prestaciones no son descollantes.


El diseño posterior está tan bien resuelto como el del hatchback. Tiene cierto aire al Mondeo.

Ford no publica cifras de aceleración y en cambio informa una velocidad máxima de 185 km/h. En mediciones propias, nos demandó casi 13 segundos llegar a 100 km/h con partida detenida. La velocidad máxima fue cercana a la cifra informada por la automotriz. Lo que hay que tener en cuenta aquí es que por el escalonamiento de las relaciones de la caja, el motor se “achancha” a alta velocidad (por encima de los 100 km/h) y eso obliga a bajar siempre un cambio (tal vez, dos) a la hora de un sobrepaso en la ruta. Es que el torque (momento de mayor fuerza del motor) se obtiene en su máximo esplendor a partir de las 5.000 rpm. La potencia máxima, en tanto, llega por arriba de las 6.000 rpm, otra cifra alta en comparación con otros motores de esta misma cilindrada. En resumen, para que el motor responda bien, hay que llevarlo bien alto en régimen.


Aunque su perfil es más familiar que deportivo, el comportamiento dinámico no defrauda.

Claro que esa pérdida de “chispa” en alta velocidad se compensa con un rendimiento muy económico en el consumo. Viajando a 100 km/h, con el motor girando a 2.750 rpm en 5ª marcha, el gasto apenas supera los 5 litros cada 100 kilómetros. A 130 km/h en autopista, con el impulsor a 3.600 rpm, la cifra se mantiene por debajo de los 7 litros. Con un tanque de 47 litros, el Fiesta KD ofrece entonces una autonomía ideal en el orden de los 700 a 750 kilómetros viajando a un promedio entre aquellas velocidades. En ciudad los números son muy distintos. Desde luego que aquí siempre influye el tránsito y el estilo de conducción de cada uno. Pero limitándose al ámbito metropolitano, combinando circulación entre avenidas con tránsito fluido y otros trayectos entre calles y avenidas en hora pico, resultó imposible obtener marcas por debajo de los 9 litros cada 100 kilómetros. A todo esto, el propio vehículo cuenta con un aviso de marcha recomendada, mediante una flecha ascendente amarilla que se enciende en el tablero cuando es momento de pasar al cambio inmediato superior.


La unidad evaluada tenía sensor de estacionamiento, bienvenido por la poca visibilidad trasera.

AL VOLANTE: DE LA CIUDAD A LA RUTA
A pesar de que sus neumáticos tienen perfil bajo (medida 195/50 R16), el Fiesta KD sedán ofrece un buen confort de marcha en ciudad, con suspensiones que copian bastante bien las imperfecciones de nuestras calles. Donde hay que tener cuidado es a la hora de cruzar cunetas o lomos de burro, ya que toca con mucha facilidad la parte baja de la trompa y peor aún si la unidad tiene colocado el chapón cubre-cárter (el original que comercializa Ford en su red de concesionarios). Más allá de esto, hay que estar atentos con los baches profundos para evitar cortes indeseados en las cubiertas. Cuando probamos el Fiesta KD hatchback nos pasó y ello nos hizo enterarnos de otro detalle no menor: no hay disponibilidad en el mercado local de neumáticos Hankook Optimo 195/50 R16, los que trae el auto de fábrica…Dicha situación también nos obligó aquella vez a circular varios kilómetros con el auxilio temporal, esas ruedas que parecen de moto y que no permiten viajar a más de 80 km/h.


Las ópticas delanteras, un sello inequívoco del Kinetic Design, el nuevo lenguaje de diseño de Ford.

Al igual que el hatchback, el Fiesta KD sedán incluye de serie la dirección con asistencia electrónica. Así, se torna un verdadero placer conducirlo en la ciudad y realizar las más ajustadas maniobras de estacionamiento, ya que la dirección es muy suave. Por el contrario, el sistema reduce la asistencia a medida que el vehículo adquiere velocidad, para otorgarle mayor control y seguridad al conductor. El volante, además, tiene buen grip y anatomía, a pesar de que no está forrado en cuero (ni siquiera es un opcional de fábrica). Circulando en rutas o autopistas, el comportamiento no defrauda. El Fiesta de anterior generación (ahora denominado “One” en la Argentina) ya ofrecía un buen desempeño y el nuevo no es la excepción. Da la sensación, incluso, de que es un chasis preparado para soportar mayor potencia.


Por dentro es tan moderno como por fuera. Calidad general superior a lo “Made in Mercosur”.

Otro detalle que llama la atención y que denota que este vehículo está “americanizado” es que las luces de giro traseras (ídem las balizas) se iluminan en color rojo (no ocurre lo mismo en el hatchback, que tiene ópticas amarillas). Algunos, enseguida, lo asociarán con el clásico Ford Falcon que como se recordará, tenía sus intermitentes en color rojo. Pero más allá de esa curiosidad, sorprende que a esta altura el auto haya sido homologado para circular así en la Argentina, con giros traseros rojos. Remitiéndonos a la experiencia personal, que en definitiva es lo que vale, terminamos dándonos cuenta que muchos automovilistas tienen dificultades para percibir que estábamos dando aviso de un giro o una detención. En definitiva, uno termina conduciendo con la idea permanente de que “ese que viene atrás no se dio cuenta que puse el giro porque es rojo y no amarillo…”


El diseño de la consola central está inspirado en un celular, con comandos simples e intuitivos.

POSICIÓN DE MANEJO / HABITABILIDAD / BAÚL
Es sencillo sentirse a gusto al volante del Fiesta KD. Los comandos están todos muy bien ubicados y son fáciles de operar. La columna de dirección se regula en altura y en profundidad, y la butaca del conductor en altura, lo que simplifica encontrar la posición ideal. Además, hay un apoyapié integrado para “calzarse” correctamente el auto. La visibilidad, en cambio, es algo complicada. Al llegar a una esquina, los pilares delanteros complican la visión más de lo habitual que en otros autos. Hay que ser muy cuidadosos cuando vienen autos desde la izquierda. Y hacia atrás ocurre lo mismo, con una “cola” alta y pilares C anchos y con una inclinación que obstruyen aún más el campo visual (claro, en algún momento había que “pagar” por ese atractivo diseño exterior). Por esa razón, y pensando en el estacionamiento, es más que recomendable la colocación de un sensor opcional como el que incluía la unidad que evaluamos.


Volante de buen tacto aunque sin cuero; instrumental moderno, pero sin indicador de temperatura; caja de recorridos cortos y precisos; comandos bien ubicados, suaves y de agradable calidad percibida.

A pesar de que el perfil de este modelo es familiar, hay que ser justos y señalar que no ofrece gran habitabilidad en las plazas traseras. Está bien para que viajen dos o tres chicos pequeños (incluye 5 apoyacabezas y 5 cinturones inerciales de 3 puntos), pero como en todo auto compacto, atrás sólo caben cómodos dos adultos. Y cómodos hasta cierto punto, porque el espacio para las piernas no es demasiado generoso. Eso se debe a que la distancia entre ejes del sedán es la misma que en el hatchback. Y así, se “hereda” esa misma falencia del modelo de 5 puertas.


Baúl de 362 litros, 80 más que en el hatch; auxilio temporal; las bisagras de la tapa del baúl reducen el espacio real de carga y pueden dañar el equipaje; los respaldos se rebaten en proporción 1/3 – 2/3.

El baúl, como apuntamos al comienzo, ofrece 81 litros más de capacidad que en el hatchback, para totalizar 362 litros. No es una mala cifra para un sedán compacto, pero aquí el Honda City le gana ampliamente, con 506 litros. También lo superan el Fiat Linea (500) y el Nissan Tiida Sedán (467). En el Fiesta KD se puede rebatir los respaldos de los asientos traseros en proporción 1/3 ó 2/3 para cargar objetos cuyo largo exceda la profundidad del baúl. Sin embargo, hay un punto mejorable: el sistema de apertura de la tapa con bisagras “intrusivas” que, al cierre, pueden dañar el equipaje y reducen la capacidad de carga real. Llama la atención que el Fiesta One, de anterior generación y posicionado por debajo de éste en la oferta de Ford, ofrezca apertura de tapa de baúl mediante mucho más prácticos e inteligentes amortiguadores.


Llantas de aleación y neumáticos en medida 195/50 R16; la tuerca de seguridad sobresale demasiado y atenta contra la estética; la visibilidad se dificulta en esquinas por el tamaño del pilar delantero.

EQUIPAMIENTO DE CONFORT Y SEGURIDAD
El Fiesta KD sedán ofrece, de serie y en cualquiera de sus versiones (Trend o Trend Plus), exactamente la misma dotación de seguridad que el hatchback. Es decir, que incluye nada menos que siete airbags (frontales, laterales, de cortina y de rodilla para el conductor), junto a frenos ABS y controles de tracción y estabilidad, entre lo más destacado. Una dotación que ni por asomo ofrecen sus rivales directos de segmento y que incluso supera a la de varios modelos de categoría superior (sin irse de la marca, es el caso del Focus II).


Muy buena posición de manejo, con regulaciones en volante y butaca; alfombras de tela con antideslizante; sistema de carga “Easy Fuel”, aquí con el tapón con llave que se ofrece como opcional.

En confort, las diferencias son más marcadas respecto del Fiesta KD hatchback. Quien elija el sedán no dispondrá de elementos valorados como el sistema multimedia SYNC desarrollado por Microsoft, la conectividad Bluetooth, el puerto USB, el control de audio en el volante y las luces de giro integradas a los espejos exteriores, entre otros. Asimismo, la versión Trend que evaluamos carece del techo corredizo eléctrico y el equipo de audio de 80 watts, 4 parlantes y 2 tweeters que sí incorpora el Trend Plus.


Como en el hatchback, las plazas traseras son pequeñas; un “huevito” de bebé entra justo y sacrificando comodidad en la plaza delantera; el 5° apoyacabeza es tipo “coma”, para mejor visibilidad.

¿Qué ofrece entonces en confort el Trend? A la mencionada dirección asistida electrónicamente y el sistema de aire acondicionado manual de accionamiento electrónico, agrega alzacristales eléctricos en las cuatro ventanillas (“one touch” sólo para el conductor), cierre centralizado en rodaje y a distancia, computadora de abordo y equipo de audio con CD-MP3 y entrada auxiliar, entre lo más destacado (ver listado más abajo).


La computadora ofrece funciones básicas y se opera desde el brazo complementario de luces; agradable tacto en controles del aire acondicionado; contrapuertas que denotan calidad.

CONCLUSIÓN
¿Cómo queda posicionado este Fiesta KD 4 puertas versión Trend dentro de la propia gama? Los $ 3.370 más que cuesta el Trend Plus se justifican porque éste incluye techo solar y un mejor equipo de audio. Pero a su vez, y más allá de que el sedán es lógicamente “más auto” que el hatchback, parece poco el confort que ofrece el 4 puertas respecto del 5 puertas, considerando que el sedán oscila entre $ 90.340 y $ 93.710, y que el hatchback está en $ 93.170, incluso por debajo del Trend Plus. ¿Es entonces muy barato el de 5 puertas o está caro el sedán? Más allá de estas anotaciones internas que hacemos dentro de la gama del modelo, está claro que frente a los rivales (City, Linea, Tiida, Aveo, Voyage y cualquier otro que se agregue al listado), esta nueva generación de Ford Fiesta es un ejemplo en seguridad, diseño y calidad general. La garantía de 3 años o 100.000 kilómetros no podía ser menor. Así, está a tono con lo que propone un vehículo concebido como producto global, que llega al mercado argentino con un plus respecto de sus rivales de segmento fabricados en el Mercosur.

EQUIPAMIENTO DESTACADO
– Frenos con sistema ABS
– Airbags delanteros frontales y laterales, de cortina y de rodilla para conductor
– Controles de estabilidad y de tracción
– Sistema de anclaje LATCH para sillas de bebé
– Cinturones inerciales de 3 puntos (5) y apoyacabezas regulables en altura (5)
– Cierre automático de puertas a 7 km/h
– Aire acondicionado manual de accionamiento electrónico
– Dirección asistida en forma electrónica
– Radio AM/FM, lector de CD-MP3 y entrada auxiliar
– Computadora de abordo
– Pack eléctrico completo (alzacristales, espejos exteriores y cierre centralizado)
– Volante regulable en altura y en profundidad, y butaca del conductor en altura
– Sistema “Ford Easy Fuel” para carga de combustible
– Luces de posición delanteras de LED
– Alarma perimetral

FICHA TÉCNICA
Carrocería:
sedán, 4 puertas, 5 plazas
Cilindrada: 1.596 cc, 4 cilindros, 16 válvulas
Alimentación: inyección electrónica multipunto
Potencia máxima/régimen: 120 CV a 6.350 rpm
Par máximo/régimen: 152 Nm a 5.000 rpm
Velocidad máxima: 185 km/h (dato oficial)
Aceleración 0 a 100 km/h: 12,9 segundos
Tracción: delantera
Dirección: con asistencia electrónica
Transmisión: manual de 5 marchas
Frenos: discos ventilados adelante; tambores atrás
Llantas: de aleación de aluminio de 16”
Neumáticos: Hankook Optimo 195/50 R16
Rueda de auxilio: de uso temporal; Maxxis 125/80 R15
Dimensiones: largo, 4,41 m; ancho, 1,72 m (sin espejos); alto, 1,47 m; entre ejes, 2,49 m
Peso: 1.195 kg (en vacío)
Capacidad baúl: 362 litros
Capacidad tanque: 47 litros
Consumo urbano: 9,5 litros/100 km (autonomía: 495 km)
Consumo a 100 km/h: 5,2 litros/100 km (autonomía: 904 km)
Consumo a 130 km/h: 6,9 litros/100 km (autonomía: 681 km)

PRECIO Y GARANTÍA (*)
La versión evaluada, Trend, se comercializa a $ 90.340. La Trend Plus se ofrece a $ 93.710. El Fiesta KD 5 puertas, disponible con equipamiento Titanium, cotiza a $ 93.170. En todos los casos, la garantía es de 3 años o 100.000 kilómetros.
(*) Valores actualizados a octubre de 2011.

POSIBLES RIVALES
Honda City, Fiat Linea, Nissan Tiida Sedán, Chevrolet Aveo, Volkswagen Voyage

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12 COMENTARIOS

  1. buena nota, me parece agradable en su diseño y me parece barbaro lo de los 7 airbag, abs, pero sobre todo me gusta los controles de traccion y estabilidad. Sigo sin entender frenos a campana atras, dicen que no es el mejor frenando a pesar del abs.

  2. Extraordinario test, muy completo y con profusión de imágenes como nos gusta!
    Estéticamente me parece un auto MUY BELLO, igual que el hatch. El interior es muy moderno y agradable, muy a lo último de Kia. Se despega de sus rivales en diseño claramente y en seguridad por supuesto.
    Ahora, para una familia tipo, por caso la mía, me parecen autos chicos. Me siento más a gusto con un Linea o un Fluence, dentro del precio.
    Me termina pareciendo un auto caro, un B sobrevaluado.
    De todos modos muy bien por Ford por ofrecer equipamiento y seguridad con un diseño francamente hermoso.

  3. Analizando las características técnicas (de por si muy detalladas y explícitas) veo que es un vehículo a considerar por las prestaciones que ofrece. Lo tendré en cuenta en la próxima renovación que haga. sdo

  4. Los felicito por la calidad de la nota, yo tengo uno desde hace 2 meses y realmente es un auto exelente y no lo digo por fanatismo yo buscaba una auto economico (en cuanto gasto de combustible)y realmente lo es, las plazas traseras no son tan acotadas,yo tengo una flia tipo mi sr, yo y dos niños 13 y 8 años respectivamente y estamos comodos.-muy pero muy seguro me siento con el control de estabilida, los frenos abs, control de tracion, etc, etc. si estan indeciso no lo duden es un exelente auto, abzo, Juan b.

  5. Sr. Tester: Realmente me parecio muy bueno su informe, hasta que me tope con la comparativa en seguridad que ud. hace sobre este vehiculo contra el Tiida o el Linea, ya en este punto me llamo muchisimo la atencion que ud. haga tanto incapie en que este vehiculo supera ampliamente, segun sus palablras, a los anteriores nombrados.
    Para aclarar, teniendo en cta solamente, que el Tiida, posee frenos a discos en las cuatro ruedas, ud tendria que reveer esta postura o cometario, que quiero creer fue por desconocimiento o impacto visual de los 7 air bags, air bags que funcionan cuando el vehiculo ya sufrio el accidente, primero hay que preveer el mismo, y para esto existen los frenos. El KD posee frenos a tambor, tecnologia del siglo 19, como ud seguramente sabra, y por estos frenos a tambor es que el sistema de ABS es de primera generacion, no como en el Tiida que es de ultima generacion, cosa que le da la posibilidad de tener repartidor electronico de frenado y asistencia a la frenada de emergencia, cosa que el KD no posee. Si seguimos con el tema, podemos tambien nombrar a las luces auxiliares, cosa que ud no hace en ningun momento en cuanto a seguridad, quiesiera preguntarle: para ud los faros auxiliares, mal llamados rompenieblas, son parte de la seguridad de un automovil, o ud los categoriza, al igual que Ford, como un adorno estetico????
    Le cometo que soy viajante, hace mas de 15 años que me desempeño como tal, y si ud sale a la ruta asiduamente, se dara cuenta de cuan fundamentales son estos faros auxiliares, delanteros y traseros.
    Lamentablemente este KD no los trae ni como equipamiento opcional.
    Por ultimo, quisiera tambien discrepar, en la compracion, ya que el Linea y el Tiida, son vehiculos de otro segmento, solo el KD es comparable a estos, principalmente al Tiida, en costo $$$$, y seguramente el Tiida es mejor en relacion precio producto, ya que el Visia es mas barato que este KD, y posee por sobre este, motor 1.8, mejor potencia, mayor torque, caja de 6 marchas, mayor espacio interior, mejor frenado etc.
    Espero su respuesta, y sinceramente no estoy conforme con su evaluacion.

    Slds.

  6. No es un mal auto, pero si es un auto chico, en espacio interior trasero.
    El auxilio temporal es Argentina no va bajo ningun punto de vista, por las distancias que recorremos y los caminos variados que usamos.
    Otro faltante imperdonable es el aislante insonorizador o como se llame que va abajo del capot para insonorizar el motor, no lo trae.
    Viene con 2 parlantes en las puertas delanteras, y atras no tiene nada.
    El rodado que tiene cuando se empiezen a romper y gastar va a ser imposible conseguirlo en esta argentina de los Kischner y de Moreno.
    Es un auto muy costoso.
    Las luces de giro traseras rojas va para Estados Unidos, no para Argentina.
    No tiene alarma volumetrica.
    Con las bisagras del baul volvieron para atras, el fiesta anterior traia otro sistema que no ocupa lugar
    El resto de tecnologia es bienvenida,control de estabilidad, control de traccion, arirbags. y si ese es el consumo real con los combustible que hay en el interior de argentina, es fabuloso.

  7. Muy buen auto, somos fanaticos de Ford, estamos esperando este modelo equipado con la moderna caja Powershift. Gracias Cars Magaszine

  8. Quisiera hacer una pregunta: me han comentado que el fiesta, tiene un ruido de fábrica (no sé de que será) que todos lo tienen y no se lo encuentran. Es verdad eso?. Me parece un poco raro, por eso querría preguntárselo a aquellos que lo tienen. Desde ya les agradeceré me respondan. Muchas gracias

  9. tengo el 5 puertas es barbaro y envidio una sola cosa a otros modelos no tiene control de velocidad crucero.-

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