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Opinión: Nissan Frontier PRO-4X en Argentina

Qué nos gustó y qué le reclamamos a la renovada pickup nacional. Prestaciones, consumos y análisis desde la nueva configuración tope de gama, por $10.816.700.

Por René Villegas
Fotos: Claudio Arena

> QUÉ PROBAMOS <
El rediseño de media vida de la Nissan Frontier (ver aquí) trajo aparejada una nueva configuración con espíritu algo más aventurero y un estilo completamente despojado de cromados. Se denomina PRO-4X y si bien no presenta cambios en el motor de 190 CV, añade interesantes agregados de equipamiento de confort y seguridad. Además, suma también diferencial trasero con bloqueo electrónico, neumáticos de uso mixto y frenos a disco en las cuatro ruedas. Todas evoluciones que la convierten en una interesante propuesta dentro del segmento “mid size” pickup, gracias a sus mejoradas aptitudes y con una cuota de modernidad en su imagen exterior.

> QUÉ NOS GUSTÓ <
+ Imagen atractiva: los detalles estéticos de esta configuración PRO-4X aportan una identidad propia: fenders, llantas y parrilla en color negro, y hasta apliques en rojo, le imprimen una cuota de singularidad extra.
+ Ayudas a la conducción: dispone de un paquete de ayudas a la conducción casi completo, con luces altas automáticas, alerta de punto ciego, asistente de cambio de carril y frenado autónomo, entre otros. Sólo le faltaría sumar control de velocidad crucero adaptativo.
+ Discos x cuatro: la gama 2022 de Frontier incorporó, en todas las versiones, discos de freno en las ruedas traseras. Esto es algo que sólo comparte con la VW Amarok V6 o la Ranger Raptor. El pedal se siente más firme, y con menor tendencia a la fatiga.
+ Bloqueo de diferencial: exclusivo de la versión PRO-4X es el bloqueo mecánico del diferencial trasero, mediante una tecla. Esto lo había perdido la Frontier cuando comenzó a producirse en la Argentina.
+ Suspensión retocada: una clave del desempeño de Frontier es el eje trasero rígido con resortes helicoidales, que Nissan denomina “multilink”. Recibió una recalibración, e incluso se lo nota más suave que antes.
+ Modos de manejo: las versiones 4×4 con caja automática (X-Gear, Platinum y PRO-4X) disponen de selector de modos de manejo, novedad para Frontier. En total son cuatro: Normal, Sport, Remolque y Off-Road.
+ Desempeño del motor: la respuesta del impulsor 2.3 biturbo de 190 CV es contundente, y el consumo en ruta resulta bastante razonable, por lo que propone un equilibrio destacado.
+ Neumáticos mixtos: si bien la variante Platinum (que reemplaza a las LE) continúa con llantas de 18”, en este caso la PRO-4X emplea cubiertas de uso mixto y en 17”, mucho más amenas para el off-road. Además, el auxilio es homogéneo.
+ Luces LED: las versiones tope de gama montan nuevas ópticas con tecnología LED. Ofrecen muy buen alcance y un diseño por demás llamativo, aunque no se regulan de manera manual dependiendo de la carga.
+ Tapizados: con un acertado diseño, en este caso presentan detalles específicos para esta configuración. Además, al cojín del asiento trasero lo notamos a mayor altura que antes, lo que beneficia en términos de comodidad.
+ Nuevo volante: si bien sólo se regula en altura, el diseño fue actualizado a la nueva imagen de la marca. Resulta mucho más atractivo que el anterior. La posición de manejo es correcta.
+ Techo corredizo: tanto Frontier como Renault Alaskan son las únicas pickups medianas con techo corredizo eléctrico, lo que aporta un extra en  materia de equipamiento de confort.
+ Cámara 360°: otro detalle de equipamiento son las cámaras de visión 360 grados, que en este caso en particular agrega una función para uso off-road inteligente, que permite ver con mayor precisión el lateral derecho, sobre la pantalla de 8”.
+ Climatización: dispone de climatizador bizona de muy buena respuesta, a lo que agrega salidas de ventilación para las plazas traseras. Asimismo, ofrece butacas delanteras con calefacción.
+ Barras de techo: por si la caja no fuera suficiente, también dispone de barras de techo longitudinales. Quizá sean un detalle más bien estético, pero pueden llegar a ser funcionales.

> QUÉ LE RECLAMAMOS <
– Caja automática lenta:
la transmisión de siete velocidades demora mucho en pasar ciertas marchas, con tendencia al patinamiento. Se nota a baja velocidad, y esto hace además que se eleve el consumo de combustible en ciudad.
– Sin dirección eléctrica: aún conserva el sistema hidráulico, ya casi en desuso, mientras buena parte de sus rivales de segmento adoptó el sistema eléctrico. Este último genera una dirección más suave y confortable, e incluso propicia el ahorro de combustible.
– Carencia de ganchos: sólo tiene un gancho de remolque delantero, y no ofrece trasero. Además, en la caja dispone de cuatro amarres en la zona baja, pero no así en la parte superior.
Sin rompeniebla trasero: si bien las luces traseras disponen de tecnología LED para algunas funciones, no ofrece antiniebla posterior. Los delanteros son también de LED.
– Definición pantalla táctil: celebramos que disponga de cuatro cámaras, pero la definición de la pantalla es algo pobre. Además, el hecho de contar con esta ayuda hace que carezca de sensor delantero de estacionamiento.

> PRESTACIONES <
Velocidad máxima:
179 km/h
Aceleración 0-100 km/h: 11,2 segundos
Elasticidad 80-120 km/h en Dª: 8,7 segundos
(*) Prestaciones cronometradas con instrumental GtechPro
(*) Mediciones sólo con conductor abordo y tanque lleno de combustible

> CONSUMOS <
Urbano:
12,5 litros/100 km
Velocidad promedio: 20 km/h
Autonomía: 640 km

A 100 km/h: 7,2 litros/100 km
Régimen: Dª a 1.900 rpm
Autonomía: 1.111 km

A 130 km/h: 10,7 litros/100 km
Régimen: Dª a 2.500 rpm
Autonomía: 747 km

Capacidad del tanque: 80 litros
Combustible indicado: gasoil Grado 3 (hasta 50 ppm de azufre)
(*) Consumos a velocidades reales con instrumental GtechPro
(*) Mediciones con climatizador encendido y modo de conducción Normal

> FECHA DE LANZAMIENTO <
Abril 2022

> ORIGEN <
Argentina

> MECÁNICA <
Motor diésel biturbo de 2.3 litros, 4 cilindros y 16 válvulas, con 190 CV de potencia a 3.750 rpm y 450 Nm de torque entre 1.500 y 2.500 rpm. Doble árbol de levas, con distribución por cadena. Transmisión automática de siete velocidades con convertidor de par y modo manual desde el selector de marchas. Tracción trasera con conexión 4×4, con alta y baja. Dirección con asistencia hidráulica. Frenos delanteros y traseros a disco. Suspensión delantera de doble horquilla y trasera multilink con eje rígido y barra estabilizadora.

> DIMENSIONES Y PESOS <
Largo: 5,26 metros
Ancho: 1,87 (sin espejos)
Alto: 1,86 metros
Entre ejes: 3,15 metros
Despeje: 25 centímetros
Capacidad de carga: 1.019 kilos (incluyendo pasajeros)
Peso: 2.188 kg (en orden de marcha)

> RODADO Y AUXILIO <
Neumáticos:
Pirelli Scorpion ATR 255/65 R17
Auxilio: Pirelli Scorpion ATR 255/65 R17 (en llanta de aleación homogénea)

> VERSIONES Y PRECIOS <
S 4×2 MT 160 CV: $5.898.900
S 4×2 AT 190 CV: $6.283.700
S 4×4 MT 160 CV: $6.455.400
XE 4×2 MT 160 CV: $7.902.300
XE 4×2 AT 190 CV: $8.458.800
X-Gear 4×4 AT 190 CV: $8.458.800
XE 4×4 MT 190 CV: $8.792.700
Platinum 4×2 AT 190 CV: $9.571.800
Platinum 4×4 AT 190 CV: $10.573.500
PRO-4X 4×4 AT 190 CV: $10.816.700 (*)
(*) Versión evaluada; precios vigentes a julio de 2022, según Nissan Argentina

> GARANTÍA <
5 años o 150.000 km

> POSIBLES RIVALES <
Chevrolet S-10
Ford Ranger
Renault Alaskan
Toyota Hilux
Volkswagen Amarok

> FICHA TÉCNICA + EQUIPAMIENTO <
Para descargar, click aquí.

> GALERÍA DE FOTOS <

La nueva configuración PRO-4X agrega varios detalles estéticos, y neumáticos de 17” de uso mixto. El rolido de la carrocería es bastante notorio.

Lateralmente no presenta cambios significativos, más allá de los fenders y barra San Antonio específicos. En ambos casos, con apliques rojos.

En el frontal está el mayor cambio de la gama. La parrilla es más grande, mientras que el capot tiene mayor altura, perdiendo la hendidura central.

Con las nuevas ópticas LED no pasa desapercibida, aportando un estilo bastante futurista. También resaltan las partes en color negro.

El estampado del portón con la inscripción Frontier es una novedad, al igual que el diseño de las ópticas posteriores, con funciones en tecnología LED.

La inscripción 4×4 del portón es el único detalle cromado en la carrocería. No cuenta con gancho trasero de remolque, y tampoco de amarre.

La barra San Antonio es específica para la configuración PRO-4X, equipamiento que comparte únicamente con las versiones X-Gear.

El nombre del modelo se hace presente también en el aplique del capot, que continúa el formato de la grilla frontal. En este caso, en un tono gris mate.

Cuenta de serie con estribos planos y, al igual que en la X-Gear, en tono negro, cuando en las versiones Platinum o XE es plateado en la parte superior.

Llantas de 17” completamente negras. Emplea neumáticos Pirelli Scorpion ATR, una ventaja para el tipo de cliente al que apunta esta configuración.

Ópticas con tecnología Full LED: tanto las DRL como el formato de cuatro proyectores para las bajas/altas aportan un toque de modernidad interesante.

El motor biturbo de la Frontier se fabrica en Europa, y es una de las claves en la alianza con Renault (es la misma base del empleado en el furgón Master).

Tiene butacas delanteras con calefacción, muy útil para el crudo invierno. La tecla central es para activar la regeneración del filtro DPF para cumplir Euro 6.

Aceleró de 0 a 100 km/h en 11,2 segundos. Buena marca, aunque el motor no llegaba a los 1.000 kilómetros de uso. Podría mejorar con los kilómetros…

El diseño del panel interior se mantiene sin cambios de importancia. Dispone de buena calidad, pero ya denota el paso de los años desde su concepción.

Al menos el volante se renovó, y en este caso mejorando notablemente su diseño. Comandos bien a mano, pero sólo ofrece regulación en altura…

El instrumental es completo y sencillo de leer. Bien por la computadora de abordo, con display color, que informa la presión de los neumáticos en libras.

La caja en ocasiones resulta un tanto lenta para cambiar de marcha, lo que nos hizo usar la función manual mucho más que en otras pickups que probamos.

Selector de la doble tracción, con baja, y teclas para bloquear el diferencial, activar el control de descenso y anular sensores de estacionamiento.

Algo diminuto es el comando para seleccionar los modos de manejo, que en este caso son cuatro: Normal, Sport, Remolque y Off-Road (sólo en 4×4).

Sistema multimedia con pantalla de 8” y conexión Android Auto o Apple CarPlay con cable. Queda ubicada en una posición un poco baja.

Una de las estrellas es la cámara de visión 360°, que puede activarse tanto al circular hacia atrás, o bien a baja velocidad. No se destaca por la definición.

Tecla para desactivar el control de tracción y estabilidad. Y activación / desactivación del sistema de detección de objetos en movimiento.

Tapizados de símil cuero con tramado específico de agradable diseño. Las butacas son cómodas, con reglaje eléctrico en esta versión tope de gama.

Además del bordado con hilos rojo o blanco, se destaca la inscripción PRO-4X. A todo esto, Nissan anuncia la denominación en inglés: “pro-four-ex”.

Otro diferencial de Frontier es el techo corredizo eléctrico, una exclusividad de esta plataforma, que comparte con su hermana Renault Alaskan.

El asiento trasero cuenta en el centro con un apoyabrazos. Puede rebatirse, lo que permite cargar pequeños objetos por detrás del mismo.

Las salidas de climatización trasera son un extra importante para los pasajeros posteriores. Cuenta además con un puerto USB para cargar dispositivos.

Plazas traseras amplias, con relativa buena altura libre a pesar del techo corredizo. La posición del asiento mejoró con respecto a las primeras Frontier.

La caja de carga cuenta con 1,52 metros de largo, 1,56 de ancho (1,13 entre ruedas) y 50 cm de alto. El cobertor de caja debe agregarse como accesorio.

La PRO-4X con un práctico accesorio para dividir la caja. El protector plástico de serie no tiene desagotes, lo que hace que se acumule el agua de lluvia.

Dispone de, únicamente, cuatro ganchos para amarrar carga. Debería contar con cuatro más a mayor altura para atar mejor lo que transportamos.

Todas las versiones cuentan en la caja de carga con un toma de 12V estanco, lo que posibilita colocar una luz, o bien algún artefacto extra.

El eje trasero rígido tiene brazos longitudinales, barra Panhard y estabilizadora y resortes. Nissan lo llama Multilink. Como sea, genera buen confort y eficacia.

El auxilio es similar al resto, incluso con una quinta llanta de aleación. Para sumar en seguridad, Nissan nos la entregó con un candado. Por las dudas.

Otra de las grandes mejoras de Frontier está en los frenos a discos traseros, de serie en todas las versiones. Mejora la percepción de frenado y la del pedal.

La Frontier en el aire por los campos de la Provincia de Buenos Aires. El eje trasero le proporciona un andar cómodo, sin temerle a los “serruchitos”.

El control de estabilidad entra en acción rápidamente para socorrer cualquier exceso. El color Gris Volcánico es exclusivo para la PRO-4X.

La renovada Nissan Frontier ya está a la venta en Argentina, y la PRO-4X es la versión tope de gama. Más seguridad y tecnología, con un look bien atractivo.

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