El Compass, proveniente de los Estados Unidos y comercializado por Chrysler, compite con rivales como el Honda CR-V, el Nissan X-Trail, el Kia Sportage o el Hyundai Tucson, entre otros. Está disponible en la Argentina con dos alternativas de transmisión –manual de 5 marchas o automática de 6 velocidades–, dos niveles de equipamiento –Sport y Limited– y únicamente motor naftero, de 2.4 litros y 170 CV.
Este SUV Light no llega a medir 4,5 metros de largo, lo que le permite moverse con soltura en la ciudad, el principal ámbito al que lo destinará el potencial usuario, más allá de alguna ocasional incursión en el barro. El Compass se diferencia de cualquier otro modelo de Jeep porque tiene motor transversal. El sistema de tracción integral se conecta automáticamente; es decir, no hay un diferencial central que distribuye la fuerza entre los dos ejes, y tampoco tiene reductora. El eje que aplica la fuerza motriz en condiciones normales es el delantero, aunque se puede intervenir manualmente en el sistema de tracción con el mando “Lock”.
El Compass posee una serie de elementos que confieren un manejo seguro, incluso para conductores con poca experiencia “off road”. Al control electrónico de tracción se suma otro de mitigación de rolido, que ayuda a evitar balanceos laterales excesivos. Pensando ya en el manejo en ruta (asfaltada o no), el control de estabilidad (ESP) permite neutralizar tendencias subvirantes o sobrevirantes. Todo ello, sumado a los frenos con ABS y asistencia al frenado de emergencia (BAS), le confiere un alto nivel de seguridad activa. En términos de seguridad pasiva, cuando un accidente no haya podido evitarse, entrarán en funcionamiento los airbags frontales y laterales tipo cortina.
El Compass llega a la Argentina únicamente con el motor naftero de 2.4 litros y 170 CV a 6.000 rpm, que entrega un torque de 220 Nm a 4.500 rpm. Una velocidad máxima de 185 km/h y poco más de 11 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h son cifras respetables para un vehículo que pesa más de 1.500 kg. Donde los números no son tan amigables es el rubro consumo. Según la información que proporciona el mismo vehículo (que no deja dudas, claro), el gasto urbano llega a superar los 16 litros cada 100 kilómetros, mientras que en ruta la ecuación se reduce a unos 12 litros/100 km. Con un tanque de sólo 51 litros, más acorde a un automóvil mediano, la autonomía se ve reducida en ciudad a no mucho más de 300 kilómetros.
La transmisión CVT es automática de variación continúa. Las marchas pasan rápida y casi imperceptiblemente sin que caiga el régimen del motor. Si uno lo desea, puede pasar los cambios con el sistema “auto-stick”, del tipo secuencial, para explotar mejor el torque. La electrónica no permitirá nunca que se superen las 6.000 rpm: el corte pasará automáticamente a la marcha siguiente.
En el equipamiento de confort, el Compass Limited sorprende tanto por presencias como por ausencias. Por ejemplo, cuenta con asientos delanteros calefaccionados, aunque éstos se regulan manualmente. El equipo de audio tiene comando satelital en el volante, pero (al menos en la unidad probada) no posee cargador de CD’s ni reproduce MP3 (sí tiene entrada auxiliar). El volante se regula en altura, mas no en profundidad. La guantera es de reducidas dimensiones, aunque hay varios espacios portaobjetos y para botellas. Los espejos exteriores eléctricos tienen desempañador, pero en lugar de climatizador automático se ofrece simplemente aire acondicionado.
Al margen de ello, el espacio interior es generoso, tanto adelante como atrás, donde hay comodidad para tres pasajeros adultos. La capacidad de carga es de 334 litros, pero puede ampliarse hasta más de 1.200 rebatiendo los asientos traseros. En el baúl, bajo una prolija cobertura de plástico duro, se aloja la rueda de auxilio, que es de uso temporal, algo habitualmente resistido por el automovilista argentino.
EQUIPAMIENTO DESTACADO
– Airbags frontales (conductor/acompañante) y laterales tipo cortina
– ABS con asistencia al frenado de urgencia (BAS)
– Butacas delanteras calefaccionadas
– Control crucero de velocidad
– Control electrónico de estabilidad (ESP)
– Control electrónico de tracción
– Espejos exteriores con desempañador
– Faros antiniebla delanteros y traseros
– Llantas de aleación de aluminio de 18”
– Sistema de nivelación de faros
– Sistema electrónico de mitigación de rolido
– Tapizados de cuero
– Techo solar eléctrico (apertura “one touch”)
FICHA TECNICA
Carrocería: tipo SUV, 5 puertas, 5 plazas
Motor: naftero, 4 cilindros, 16 válvulas
Cilindrada: 2.359 cc
Potencia máxima/régimen: 170 CV/6.000 rpm
Par máximo/régimen: 220 Nm/4.500 rpm
Velocidad máxima: 185 km/h
Aceleración 0 a 100 km/h: 11,3s
Tracción: integral
Transmisión: a
utomática de 6 marchas con “auto-stick”
Frenos: delanteros de discos ventilados, traseros de disco
Dimensiones: largo, 4.405 mm; ancho, 1.810 mm; alto, 1.630 mm; entre ejes, 2.635 mm; trochas delantera/trasera, 1.520 mm
Neumáticos y llantas: Continental 215/55 R18, de aleación
Peso bruto: 1.569 kg
Capacidad baúl: 334 litros, ampliable hasta 1.277 litros
Capacidad tanque: 51,5 litros
Consumo urbano: 15,8 litros/100 km
Consumo a 120 km/h: 12,1 litros/100 km
PRECIO
La versión probada, 2.4 CVT Limited, se comercializa 37.308 dólares. Hay otras tres opciones disponibles: Limited con caja manual de 5 marchas, por U$S 35.566; Sport con transmisión automática CVT, a U$S 34.421; y Sport con caja manual, en U$S 32.265.
RIVALES
Honda CRV, Nissan X-Trail, Toyota RAV 4, Kia Sportage, Hyundai Tucson
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